Descripción general del programa de la reparación comunitaria
Partiendo de la constatación de que algunas regiones y comunidades consideran haber sufrido colectivamente, de manera directa o indirecta, de las secuelas de las graves violaciones de los derechos humanos, la Instancia Equidad y Reconciliación (IRE) ha considerado que además de las indemnizaciones y de las reparaciones debidas a las víctimas de las graves violaciones de los derechos humanos, la reparación debe integrar una dimensión comunitaria. Esta constatación requiere un esfuerzo suplementario de solidaridad, medidas de promoción de la igualdad de oportunidades y un proceso progresivo de discriminación positiva a favor de las regiones y comunidades en cuestión.
La dimensión comunitaria de la reparación ha sido desarrollada a lo largo del mandato del la IER gracias a una movilización de los actores locales en las distintas regiones en cuestión. La IER animó varias decenas de reuniones y talleres. El trabajo fue coronado por la organización del foro nacional sobre la reparación que reunió a más de 200 asociaciones.
Sobre la base de los resultados de estos trabajos, la IER concibió las recomendaciones relativas a la reparación comunitaria de manera que permite la rehabilitación de las regiones y las comunidades y la preservación positiva de la memoria. La reparación comunitaria es tratada bajo su doble dimensión material y simbólica. La dimensión material tomará forma a través de programas de desarrollo socioeconómico cuyo alcance no se limita a la consideración de los daños, pero integra la satisfacción de un gran número de necesidades, mientras que la dimensión simbólica se traducirá en forma de reconocimiento del Estado de los perjuicios causados a través de la organización de actividades de conmemoración, de la edificación de monumentos, la rehabilitación y la reconversión de los centros de detención secreta, etc
En resumen, se trata de un gesto de reconocimiento de los daños causados pero también de reparación del perjuicio cuyo objetivo consiste en restablecer la confianza de las víctimas en el Estado, reforzar el sentimiento de la ciudadanía, de consolidar la solidaridad social y por consiguiente garantizar la reconciliación.
Aplicación del programa de reparación comunitaria
De conformidad a estas recomendaciones, el Consejo Consultivo de los Derechos humanos, se ha encargado de coordinar la operación de seguimiento de la aplicación con los departamentos ministeriales.
Estrategias de intervención
El programa de reparación comunitaria tiene una doble estrategia de acción tanto a nivel local como nacional:
A nivel local, la lógica de intervención favorecerá la gobernanza local movilizando e implicando los protagonistas locales: sociedad civil y colectividades locales en particular.
Al nivel nacional, destaca la implicación concreta del Estado en el programa de reparación comunitaria en forma de participación financiera pero también de simplificación de los procedimientos administrativos y de apoyo logístico.
Enfoques de trabajo
La aplicación del programa se basa en tres enfoques principales: El enfoque derecho haciendo hincapié en los derechos fundamentales de las comunidades; el enfoque participativo consolidando la implicación efectiva de los afectados a todos los niveles; y el enfoque género garantizando los intereses de las mujeres y de los grupos vulnerables. Esta aplicación implica un enfoque participativo inclusivo de varios actores beneficiarios, a saber, las comunidades que han sufrido de manera directa e indirecta de los perjuicios vinculados a las graves violaciones de derechos humanos y las asociaciones locales que trabajan en favor de las comunidades arriba indicadas.
Regiones en cuestión
El programa de reparación comunitaria, adoptado por la comisión de seguimiento de las recomendaciones de la IER se refiere a las regiones que obedecen por lo menos a uno de los dos siguientes criterios: La implantación de un centro de detención secreta combinada a una marginalización implícita y/o la existencia de una presunción de sanción colectiva vinculada al desarrollo de algunos acontecimientos violentos probados y documentados.
La organisacion institutional del programa
La estructura institucional establecida se basa en tres órganos principales, a saber:
El Comité de control dotado de un papel de control político está formado por CCDH, de los departamentos ministeriales en cuestión, de las coordinaciones locales, de la cooperación internacional y las agencias de ejecución;
Las unidades de gestión del Programa (UGP) encargadas de garantizar la gestión técnica, económica y financiera del programa;
Las coordinaciones locales responsables de promover la participación local y garantizar la visibilidad y la gestión técnica del programa local. Están formadas por el CCDH, las autoridades locales, los servicios descentralizados del Estado, las Colectividades Locales y las asociaciones asociadas al programa.